lunes, 6 de septiembre de 2010

Del veto del silencio a los volcanes del infierno

Por Raúl San Miguel

Foto: Tomada de Internet

Existe una sentencia o proverbio popular que advierte: “el que calla otorga”. Así ha ocurrido durante todos los años desde que los medios de información se han convertido en las principales armas de la preparación artillera para cualquier ofensiva militar imperialista. Mucho más, la frase se ajusta (perfectamente) a la forma en que las transnacionales de la información condicionan la psiquis de las personas durante un real bombardeo de desinformación o reportes enajenantes para hacer posible la metabolización (orgánicamente hablando) de los despachos publicados por la prensa occidental en cualquiera de los soportes mediáticos empleados en la actualidad.
De esta manera se garantiza un silencio mediático que funciona, mientras se “invade” la opinión pública internacional con despachos (ver el predominio en los principales sitios de la Internet) de asuntos domésticos relacionados con las monarquías, el glamour porno o erótico de algunas actrices, la “funcionalidad del bisturí y la silicona” y otros banales vericuetos que pudieran ser hasta relajantes o simpáticos de no ser porque el planeta está a punto de entrar en el agujero negro de un conflicto nuclear.
El Oriente Medio _con la presencia de unidades navales y aéreas de combate estadounidenses y el alistamiento de las fuerzas de la Guardia de la Revolución iraní, ante la amenaza de agresión de Israel_, comienza a expandir el aliento de las fumarolas de la guerra. De esta manera la región alcanza una “temperatura” en la cual pudieran colisionar estos ejércitos colocados en posición de ataque a partir de la luz verde para la inspección de los buques persas que se trasladen por el Estrecho de Ormuz.
De una y otra parte se lanzan sórdidas advertencias. Salvo que el resto de los espectadores (en el mundo) pensamos en qué pudiera ocurrir después que se lance el primer misil. Por su parte, Teherán anunció que “cualquier ataque israelí contra Irán provocaría la destrucción de Israel”.
Considero que la presencia de un alto funcionario del gobierno de Irán en Qatar para entrevistarse con el jeque Hamad Bin Jalifa al Thani (estrecho aliado de los Estados Unidos) expresa la voluntad del gobierno persa a un diálogo sin presiones, ni exclusiones que le impidan continuar el desarrollo de su programa nuclear con fines pacíficos.
“Estados Unidos y la entidad sionista (Israel) no podrán golpear a Irán en este momento. Esto es una entelequia (…). Cualquier medida contra Irán significaría la eliminación de la entidad sionista de la geografía política”, aseguró Ahmadineyad desde Qatar, según recoge la agencia de noticias oficial iraní, IRNA.
El dirigente iraní viajó a Qatar para entrevistarse con el emir qatarí, el jeque Hamad bin Jalifa al Thani, estrecho aliado de Estados Unidos.
El embajador de Teherán en La Habana, Mustafá Alaei, afirmó que su país no tolerará los registros en sus naves mercantes acordados por el organismo internacional y consideró que dicha acción podría provocar una “guerra de impredecibles consecuencias”
El embajador de Irán en La Habana, Mustafá Alaei, reiteró que su país no tolerará los registros en sus barcos mercantes acordados por la ONU y consideró que dicha acción podría provocar una “guerra de impredecibles consecuencias”, según una entrevista publicada en el diario Granma. “Irán no lo va a permitir, y por tanto mi país no se hace responsable de lo que pueda ocurrir si quieren revisar la carga de un barco o de una nave aérea”, declaró Alaei al rotativo.
“Nuestro pueblo se está preparando para dar respuesta a cualquier ataque. Irán no ha perdido el tiempo y se está alistando militarmente y resistirá. La resolución 1929 aprobada por el Consejo de Seguridad de la ONU el 9 de junio, prevé registros sorpresa en embarcaciones iraníes, como parte de las sanciones contra Teherán por su programa nuclear.
Al respecto, Alaei dijo que si Estados Unidos e Israel lanzan un ataque nuclear no se vería afectado sólo Irán “sino todos los Estados vecinos y otros mucho más lejanos”. “Recordemos que en la región hay países con armas nucleares como India, Paquistán, la República Democrática de Corea, Rusia y China que podrían verse involucrados también”, afirmó.
El embajador estimó que su país “es foco de atención por su petróleo y otros recursos energéticos” y que su ubicación “en el Golfo Pérsico y la cercanía con el estrecho de Ormuz implica que cualquier acción militar contra el país va a repercutir directamente en el petróleo y se va a ver afectado todo el mundo”.
El asunto realmente es muy serio. No puedo imaginar que todo este problema sea por el petróleo, como explicara recientemente el líder de la Revolución cubana, Comandante en Jefe, Fidel Castro Ruz, a los estudiantes universitarios cubanos. El asunto va mucho más allá del control de los recursos energéticos mundiales por una potencia: Los Estados Unidos. Israel está más sediento que nunca para concretar la oportunidad de un “golpe nuclear quirúrgico” que ya tiene un precedente en sus acciones contra Irán. Solo que esta vez, no podrá ser silenciado una vez que se desate el holocausto. Las bombas hablarán por la muerte y gritarán tanto en su estruendo nuclear que no serán necesarios los diarios, ni la Internet, para ver encendidas las fumarolas en los volcanes del infierno.