lunes, 5 de septiembre de 2011

Obama y su estrategia global en la USAID






ASUNTOS DE FAMILIA

Raúl San Miguel

Foto: Tomadas de la Internet

Poco después de que el presidente Barack Obama se instalara en la Casa Blanca, millones de norteamericanos pensaron que asistían a uno de los eventos que daría un giro en dirección contraria a la política seguida por las anteriores administraciones con respecto a las abismales diferencias sociales que afectan, fundamentalmente, a las comunidades negras y latinas en Norteamérica. Pero se equivocaron. También erraron los que, fuera de la Unión, esperaron un cambio en la estratégica actitud belicista mantenida por el imperio en su propósito de controlar las reservas energéticas y los principales recursos dispersos en naciones de todo el mundo.

Con respecto a Cuba, recuerdo que al principio, se mantuvo cauteloso. Apenas quería hacer referencia al tema, a pesar de las expectativas creadas por sus propias declaraciones preelectorales y que motivaron el apoyo del entonces candidato presidencial en la comunidad cubana asentada en el estado de Florida. Por supuesto, manipulada por los influyentes congresistas Ileana Ros Lethinen, Bob Menéndez y los hermanos Díaz-Balart, por citar los más visibles personajes que mantienen una abierta posición contra la Revolución cubana desde sus escaños en el Congreso estadounidense (léase permanencia y vigencia de leyes extraterritoriales como la Helm-Burton y Torricelly).

Sin embargo, a pesar de la crisis presupuestaria que abruma a la Casa Blanca, el presidente Barack Obama, hace unos meses atrás, solicitó un aumento de los fondos para las operaciones de su gobierno contra Cuba durante el año fiscal 2012. El proyecto de presupuesto federal para dicho período, que comienza el 1 de octubre de 2011, incrementa en más de cuatro millones de dólares el dinero asignado el pasado año a esas acciones, o sea un acrecimiento del 34 por ciento, revelan documentos oficiales.

Esos fondos están destinados a fortalecer la labor de la Sección de Intereses de Estados Unidos en La Habana (SINA), y la Oficina de Asuntos Cubanos que dirige la política hacia la vecina isla desde el Departamento del Estado en Washington, señala el sitio en Internet cubamoneyproject.org.

Según un reporte fechado por el sitio digital cubano Cubadebate y la Agencia Internacional de Noticias, Prensa Latina, en total _para las operaciones de ambas oficinas en 2012_, serían asignados 11 millones 742 mil dólares, monto superior al asignado para el actual año, ascendente a ocho millones 735 mil, compara ese medio digital del periodista y profesor norteamericano Tracey Eaton. Esto significa que del incremento de cuatro millones 88 mil dólares solicitados para el 2012, según la documentación hecha pública por cubamoneyproject.org, las arcas de la SINA recibirían un millón 82 mil dólares, y la Oficina de Asuntos Cubanos en Washington, tres millones seis mil dólares.

Los detalles se encuentran en la argumentación de la propuesta del Presupuesto del gobierno federal estadounidense previsto para 2012, documento sometido por la administración de Obama al Congreso el 14 de febrero del año en curso. A los analistas internacionales les resulta significativo que, en época de recortes presupuestarios, _incluso la Casa Blanca_ propuso y solicite un aumento para financiar las operaciones de Washington hacia Cuba.

A lo largo de los años, el gobierno cubano ha denunciado insistentemente el papel que juega la SINA en la ejecución de la política y acciones subversivas contra la isla y la participación de la USAID en el cumplimiento de los programas subversivos y en cuyo presupuesto se observan otros gastos relacionados con planes de agresión contra Cuba. Por ejemplo, el presupuesto incluiría 30.5 millones de dólares para las emisoras anti-cubanas Radio y TV Martí, tal como consigna el documento a consideración del Congreso estadounidense.

El señor Alan Gross, detenido en Cuba por su probada actividad subversiva contra la Revolución cubana, posa en Afganistán, uno de los territorios donde trabajó en nombre de la CIA y de la USAID.



El cierre de la prisión ubicada en la Base Naval estadounidense, en Guantánamo, territorio cubano ilegalmente ocupado no ha sido realizado como propuso el señor Barack.



EL SEÑOR BARACK Y LA USAID, NEGOCIO LEGADO DE FAMILIA

Se conoce que la administración de Obama propone gastar 20 millones de dólares en 2012 en los llamados programas para fomentar la democracia en Cuba, principalmente a través la agencia gubernamental USAID con el objetivo expreso de compulsar un “cambio de régimen” en la isla. Por ejemplo, en 1996, esa “agencia” invirtió por lo menos 140 millones en tales programas, señaló el periodista Eaton en otro de sus artículos.

La nota publicada por cubamoneyproject apunta que el Departamento de Estado pide estos grandes aumentos en los gastos relacionados con Cuba mientras solicita un incremento global para sus finanzas de solo un uno por ciento y propone cortes drásticos en otros acápites. En total, el dinero públicamente solicitado por la Casa Blanca al Capitolio para financiar sus políticas contra Cuba durante 2012 se eleva a 62.24 millones de dólares, sumando las partidas de la SINA, su oficina rectora en Washington, la USAID y Radio/TV Martí.

Los vínculos de la familia Obama con la USAID y la CIA, datan de muchas décadas atrás. Según el trabajo especial del Wayne Madsen Report (WMR), se revelaba que los vínculos de la Casa Blanca con el padre del actual presidente estadounidense, posibilitó el envío a Estados Unidos de 280 estudiantes originarios de Sudáfrica y de los países del este de África que ya habían alcanzado la independencia o que estaban a punto de hacerlo. Mediante la entrega de diplomas universitarios. De esta manera, Washington se estaba garantizando la simpatía de los estudiantes “elegidos”, precisamente en tiempos en que alcanzaban mayores objetivos los movimientos de liberación nacional por la independencia de muchas de estas naciones. Por otra parte, se condicionaba la captación de los nuevos líderes que, al ser preparados en las universidades norteamericanas y con programas gubernamentales financiados y con el apoyo de la CIA, se esperaba contrarrestar la propuesta de planes similares de la exUnión Soviética y la República Popular Socialista China.

El padre de Barack Obama fue el primer estudiante extranjero inscrito en la Universidad de Hawai. Obama padre y la madre de Barack Obama, la Srta. Ann Stanley Dunham, se conocieron en un curso de lengua rusa, en 1959, y se casaron en 1961.
El programa de invitación de estudiantes africanos estaba en manos del líder nacionalista Tom Mboya, mentor y amigo de Obama padre y, al igual que él, originario de la tribu luo. Los documentos de la CIA demuestran la activa cooperación de Mboya con la Agencia Central de Inteligencia, para impedir que los nacionalistas prosoviéticos y prochinos adquiriesen influencia sobre los movimientos nacionalistas panafricanos en los sectores político, estudiantil y obrero.

Barack, padre



Uno de los más encarnizados oponentes de Mboya era el primer presidente de la República de Ghana, Kwame Nkrumah, derrocado en 1966 durante una operación montada por la CIA. Al año siguiente, Barack Obama y su madre se reunieron con Lolo Soetoro en Indonesia. Soetoro había conocido a Ann Dunham en 1965, en la Universidad de Hawai, cuando el joven Barack tenía sólo 4 años.

Así que Barack y su madre se instalaron en Yakarta en 1967. En 1965, el general Suharto había llamado a Lolo Soetoro para que se incorporara al alto mando militar y ayudara a la planificación, con ayuda de la CIA, del genocidio de indonesios y de chino-indonesios procomunistas a través de todo el país. Suharto consolidó su poder en Indonesia en 1966, el mismo año en que Mboya ayudaba a la CIA a encontrar entre los nacionalistas panafricanos el apoyo necesario para derrocar al presidente Nkrumah en Ghana.

Embarazada de Barack Obama, Dunham abandonó sus estudios en la Universidad de Hawai en 1960. El padre de Barack Obama abandonó Hawai en 1962 para ir a estudiar en Harvard. Dunham y el padre de Barack Obama se divorciaron en 1964.

En el otoño de 1961, Dunham se inscribió en la Universidad de Washington y comenzó a criar a su hijo. Se reincorporó a la Universidad de Hawai entre 1963 y 1966. Después de unirse a Dunham en marzo de 1965, Lolo Soetoro salió de Hawai para Indonesia el 20 de julio de 1965, tres meses antes de las operaciones de la CIA contra Sukarno.
Resulta evidente que Soetoro, promovido al grado de coronel por Suharto, regresó a Yakarta para participar en el golpe de Estado contra Sukarno, acción que provocó la muerte de un millón de civiles indonesios.

El presidente Obama preferiría que la prensa ignorara ese pasado. Y eso precisamente fue lo que hizo la prensa durante la campaña de las primarias y durante la elección presidencial de 2008.

En 1967, luego de su llegada a Indonesia con Obama junior, Dunham impartió clases de inglés en la embajada de Estados Unidos en Yakarta, que incluía una de las más importantes estaciones de la CIA en toda Asia, con importantes filiales en Surabaya, en el este de Java, y en Medan, en la isla de Sumatra. Jones dejó su cargo de decano de la Universidad de Hawai en 1968.

En realidad, la madre de Obama impartía clases de inglés por cuenta de la USAID, organización de gran envergadura que servía de pantalla para las actividades secretas de la CIA en Indonesia y en todo el sudeste asiático, en países como Laos, el sur de Vietnam y Tailandia.

El programa de la USAID se conoce con el nombre Lembaga Pendidikan Pembinaan Manajemen. Aunque su propio hijo y la gente que se relacionó con ella en Hawai describen a Dunham como una persona de mentalidad libre, «hija de los años 60», las actividades que realizó en Indonesia contradicen la tesis de que fuera una “hippie”. Por su parte, el señor presidente Barack Obama logró disimular sus propios vínculos con la agencia, al igual que los de sus padres, incluso como su padre adoptivo y su abuela (muy poco se sabe sobre su abuelo, Stanley Dunham.

Las torturas en Afganistán continuan y el presidente Barack habla de retirar las fuerzas y dejar ¡10 000 efectivos!



Negocios son negocios y el actual presidente norteamericano tiene el legado de la CIA en la génesis de la formación personal para actuar como un agente encubierto al servicio de los más oscuros propósitos de los círculos del poder en la Casa Blanca, tal como lo aprendió en su propia familia.

En la foto, junto al jefe de la OTAN, el señor Anderson