Raúl
San Miguel
Óleo de
Vicente Bonachea
A Raúl Valdés Vivó y Guillermo Cabrera
(a quien Fidel llamó el Genio)
por la eterna amistad,
por las confesiones más íntimas,
por haberme elegido, entre tantos,
para ofrecerme el consejo oportuno,
para ofrecerme el consejo oportuno,
a ambos, por todas sus enseñanzas,
por todos los momentos.
por todos los momentos.
"El segundo invierno: Llegará vacío,
se alojará en los huesos, sobre la tierra muerta,
y el silencio también morirá,
cuando germine la nueva estrella”.
RSM.
Habían
pasado algunos meses cuando todo estuvo cubierto por el hielo. Entonces,
tomaron la decisión más difícil: encender el último cerillo y lograr que la
llama consumiera la última porción de combustible para ver la luz por última
vez. Se reunieron en derredor de la extinta hoguera y una chispa cruzó rauda
como una centella y la llama, tambaleante primero, oscilante como un espectro después, se
alzó dulce sobre la última página del libro y, los hombres, pudieron leer las
últimas letras:
“Los dos la miramos. Y la foto parecía decir:
_
¡Señores, no olviden las enseñanzas de la Historia! ¡No olviden Nuremberg!”*
Y el
fuego, en su último estertor dejó, por última vez, toda la tierra a oscuras.
RSM.
*Nuremberg (Epílogo)
A.Poltorak