viernes, 29 de octubre de 2010

Honras para un asesino

Raúl San Miguel

Foto: Tomada de Internet

En los Estados Unidos, “el país de la democraCIA” esta permitido todo, absolutamente todo lo que le conveniente a los intereses de los círculos de poder en el gobierno (cualquiera que sea) en Washington. Ejemplos sobran, pero quiero ser específico. Me refiero a los honores recibidos por un asesino en un recinto universitario de Miami. Orlando Bosh, es considerado un "héroe", un ejemplo para las nuevas generaciones de terroristas que podrían colocar bombas, destruir vidas, derribar aviones de pasajeros y matar presidentes constitucionalmente establecidos y decirlo públicamente.
Lo peor es que este hecho indignante ocurre en el país que vocifera su “posición de avanzada” en la lucha contra el terrorismo, a escala internacional. Sin embargo, sus servicios de inteligencia “no fueron capaces” de alertar el abominable crimen del 11 de septiembre, aún cuando se reportaban informes que aseguraban la posibilidad de este ataque contra las Torres del World Trade Center, en Nueva York.
Por supuesto, aquel "atentado", fue “el detonante” para lanzar la ofensiva contra Afganistán e Iraq, mientras el principal culpable (Bin Laden) ex agente de la CIA, no ha podido ser capturado; aunque (es lógico) no es el propósito de los servicios de inteligencia de los Estados Unidos. Han muerto demasiados inocentes en estas naciones invadidas para creer que Bin Laden es el objetivo de esta “guerra contra el terrorismo”.
¿Cuál puede ser la enseñanza para nuestros hijos? ¿Honrar a un terrorista que se jacta de haber asesinado “cuatro negritas…” como se refirió al atentado contra el avión de Cubana de Aviación, saboteado sobre el cielo de Barbados el 6 de octubre de 1976? No, no eran “cuatro negritas”. Fueron muchachos y muchachas llenos de sueños y un futuro prometedor como atletas y que habían arrasado con todas las medallas en el certamen de esgrima de los Juegos Centroamericanos y del Caribe, celebrados ese año en Venezuela, en el cual participaron como dignos representantes de Cuba. Los demás, también eran personas con familias, coreanos y guyaneses, otros, los miembros de la tripulación y otra tripulación que venía a descansar a su Patria. ¿Con qué derecho un criminal puede ser liberado, por el gobierno, y ser vitoreado como un héroe? ¿Qué Estado civil, democrático, qué civilización moderna puede aceptar esa felonía?



¿Cómo es posible, entonces, aceptar que Cinco jóvenes cubanos permanezcan prisioneros en cárceles de los Estados Unidos por prevenir a las autoridades de su país de las acciones terroristas cometidas por asesinos como Luis Posada Carriles y Orlando Bosh?

Fue, precisamente, un tribunal de Miami, donde se elaboró la trama para culpar a estos jóvenes infiltrados en grupos terroristas que tienen bases militares y emplean sofisticadas armas y explosivos, como el C-4, que no pueden ser adquiridos en tiendas de armas. Otro asunto que debe estar pendiente en una sociedad donde el derecho a portar armas incrementa el delito, la violencia u otros males propios de la naturaleza retorcida de aquellos que defienden la tesis de aceptar vivir en una sociedad donde se pueden comprar fusiles de asalto automáticos (de todos los calibres), lanzacohetes, etc. No hay otra respuesta, en este caso. Salen de los arsenales del Pentágono. ¿No recuerdan el fusil, calibre 50, de la marca Barrett, que se pretendió utilizar para eliminar al Comandante en Jefe, Fidel Castro Ruz, cuando asistía a una reunión en las Islas Margarita, territorio de Venezuela? ¿Acaso no recuerdan que también quisieron emplear explosivos para volar el Paraninfo de la Universidad de Panamá donde iría el líder de la Revolución cubana?
¿Cuántos hubiesen muerto en aquel atentado? ¿Con qué derecho la CIA y el gobierno de los Estados Unidos pueden admitir acciones terroristas como estas y que, además, apoyan (sus servicios de inteligencia) para derrocar a gobiernos constitucionales, a políticos y presidentes?
En el caso de Fidel la cantidad de intentos de asesinato superan los 640. Incluso, es pública la opinión del l terrorista convicto y ahora “honrado” Orlando Bosh, su insistencia por acabar la vida del líder histórico de la Revolución cubana y de colocar bombas en hoteles y centros turísticos de La Habana.
¿Qué derecho tenían de asesinar al joven italiano Fabio Di Celmo u otros que han sido víctimas como los del sabotaje al vapor francés La Coubre, la Tienda el Encanto y tantos otros. ¿Por qué?
¿Por qué el gobierno de los Estados Unidos continúa su absurda política de bloqueo contra Cuba y arremete contra las empresas y filiales que intentan vender medicamentos a nuestro país, ni siquiera aquellos utilizados para aliviar el dolor de los niños afectados por el cáncer?
¿Por qué ha permitido la libertad a un asesino como Orlando Bosh, responsable de la introducción de enfermedades como una de las cepas del dengue hemorrágico, que no se conocía en Cuba, y destruyó las vidas de más de cien niños? ¿Por qué?
Llamo, desde mi blog, a todas las personas honradas y decentes del mundo a impedir que estos como estos se repitan. A que nos apoyen, como ocurrió recientemente en la votación de la Resolución de Cuba contra el bloqueo en la ONU. A que liberen a los Cinco jóvenes cubanos que están presos en cárceles norteamericanas, bajo el peor de los regímenes carcelarios por impedir estas muertes a su país e incluso la de ciudadanos norteamericanos y de otros países. El propio terrorista Orlando Bosh, aseguró que volvería a poner la bomba (En otro avión de pasajeros) ¿…Y qué?
Es obvio, tanta vileza solo puede describirse como impúdica si no conseguimos otra palabra en relación este hecho. En esta ocasión prefiero publicar, íntegramente, la Carta Abierta, enviada a la Presidenta de la Universidad de Miami, que reproduzco y apoyo.


CARTA ABIERTA A LA PRESIDENTA DE LA UNIVERSIDAD DE MIAMI, DONNA SHALALA
Honorable Donna E. Shalala,
Presidenta
Universidad de Miami
Estimada Presidenta Shalala,
Nosotros, académicos de Estados Unidos y ex-alumnos de la Universidad de Miami, le expresamos nuestra más profunda indignación con respecto al evento que tuvo lugar el 12 de octubre del 2010, en el Instituto de Estudios Cubanos y Cubano-Americanos (ICCAS) de la Universidad de Miami.
En este acto se rindió homenaje al terrorista convicto Orlando Bosch.
Orlando Bosch ha sido arrestado, enjuiciado y sentenciado por innumerables actos terroristas en Venezuela, Estados Unidos y otros países. En 1968, fue condenado a 10 años de privación de libertad por el atentado a un buque polaco que se encontraba anclado en uno de los muelles de Miami.
Posteriormente, cumplió diez años de cárcel en Venezuela por el derribo de un avión cubano el 6 de octubre de 1976, sabotaje en el que perdieron la vida las 73 personas a bordo. El Fiscal General de Estados Unidos Dick Thornburgh lo calificó como “terrorista sin arrepentimiento” ["unrepentant terrorist"], y el Fiscal General Asociado Joe D. Whitley se refirió a él como una “amenaza a la Seguridad Nacional” ["a threat to National Security"] (Exclusion Proceeding for Orlando Busch Ávila; ver documentación adjunta). Ambos Fiscales se desempeñaron en sus funciones de leguleyos durante la administración de George H. W. Bush.
Documentos de la CIA y del FBI recientemente desclasificados (disponibles en la Internet), son prueba fehaciente de la validez de las aseveraciones de estos Fiscales. Por ejemplo, un informe de 1979 reportó la opinión de Bosch sobre la voladura del avión de Cubana, con respecto a lo cual expresó: “Hay momentos en que no se puede evitar hacer daño a gente inocente” (Appendix to Hearings). Por otra parte, un cable del FBI con fecha del 14 de octubre de 1976 refleja las palabras de Luis Posada Carriles — “compañero de lucha” de Bosch–, quien dijo que “Orlando sabía todos los detalles” del avión que iba a ser derribado (Intelligence Information Cable).
Solicitamos que se inicie con la mayor premura una investigación acerca de este homenaje, en el cual figuró como telón de fondo el logotipo de la Universidad de Miami. Como institución de altos estudios que es, la Universidad de Miami tiene una misión educativa, y a la vez, una insoslayable función de responsabilidad social. Rendir honores a un terrorista, presentándolo como modelo para una comunidad, atenta contra los principios básicos de la academia.
Gracias por su interés.
Sinceramente:
• María Isabel Alfonso, PhD. Assistant Professor of Spanish. St. Joseph’s College, New York. (University of Miami Alumnus).
• Noam Chomsky, Institute Professor, Retired. MIT.
• Luis Duno-Gottberg, PhD. Associate Professor of Caribbean and Film Studies, Duncan College Master, Texas.
• John Walton Cotman, PhD. Associate Professor of Political Science. Howard University, Washington.
• David Carlson, PhD. Assistant Professor of Latin American History. The University of Texas-Pan American, Texas.
• Rick Miller, PhD. Associate Professor of Art. St. Joseph’s College, New York
• Lisa Glidden, PhD. Assistant Professor of Comparative Politics, Latin American Studies. SUNY College at Oswego, New York
• Iraida H. Lopez, Ph.D. Professor of Spanish. Ramapo College of New Jersey, New Jersey
• Arturo Lopez-Levy, Lecturer. PhD Candidate. Josef Korbel School of International Studies. University of Denver, Colorado.
• Kenneth E. Bauzon, Ph.D. Professor of Political Science. St. Joseph’s College, New York
• Emilio Bejel, Distinguished Professor of Latin American Studies. University of California at Davis, California
• Miren Uriarte, PhD. Professor of Human Services. University of Massachusetts Boston
• David L. Strug, PhD. Professor of Social Work. Yeshiva University, New York
• Dionisio Márquez Arreaza, Professor. Universidad de Los Andes, Mérida, Venezuela (University of Miami Alumnus)
• Judith A. Weiss. Research Professor and Professor Emerita. Mount Allison University, Canada
• Liliam Dominguez, PhD Candidate. Barry University, Florida. (University of Miami Alumnus).
• Mirella Landriscina, PhD. Professor of Sociology. St. Joseph’s College, New York
• Douglas Friedman, PhD. Associate Professor of Political Science. College of Charleston, South Carolina
• Samuel Farber. Samuel Farber. Professor Emeritus, Political Science. Brooklyn College of CUNY, New York
• Dick Cluster, Associate Director. University Honors Program. University of Massachusetts at Boston
• Fernando Coronil. Presidential Professor. Graduate Center. CUNY, NY.
• Zoya Kocur, PhD Candidate. Middlesex University. London. NYU, New York, NY.
• William Van Norman, Jr. PhD. Assistant Professor of Latin American History. James Madison University, Virginia
• Alejandro de la Fuente, PhD. UCIS Research Professor. University of Pittsburgh, Pennsylvania
• Antoinette Hertel, Ph.D. Associate Professor of Spanish. St. Joseph’s College, New York
• Susan Eckstein, PhD. Professor of Sociology and International Relations. Boston University, Massachusetts
• Tania Triana, PhD. Assistant Professor of Spanish, University of Oregon
• Ana M. López, PhD. Associate Provost for Faculty Affairs. Tulane University, Louisiana
• Eduardo González, PhD. Professor. Director of the Spanish and Latin American Subdivision. The Johns Hopkins University, Baltimore, Maryland
• Trevor H Whitbread. M.A. Spanish Candidate. University of Oregon
• Francisco A. Scarano, Ph.D. Professor of History. University of Wisconsin-Madison, Wisconsin
• Antonio Lauria-Perricelli, PhD. Adjunct Professor. Gallatin School, New York University, New York
• Enrique Sacerio-Gari, PhD. Dorothy Nepper Marshall Professor of Hispanic and Hispanic-American Studies. Bryn Mawr College, Pennsylvania
• Antonia Darder, PhD. Distinguished Professor of Education. University of Illinois Urbana Champaign, Illinois.
• Edwin Murillo, Ph.D. Assistant Professor of Spanish. Penn State University-Berks, Pensylvannia (University of Miami Alumnus)
• Beatriz Calvo Peña. PhD. Researcher. University Carlos III, Madrid. (University of Miami Alumni)
• Julie Skurski, Ph.D. Distinguished Lecturer of Anthropology. CUNY Graduate Center. New York
• Leslie S. Offutt, PhD. Associate Professor and Chair, Department of History. Vassar College, New York.
• David J. Vázquez, PhD. Assistant Professor of English. University of Oregon, Oregon
• Ricardo Pérez, Ph.D. Associate Professor of Anthropology. Eastern Connecticut State University, Connecticut
PD: Los suscriptores de esta carta no comparten necesariamente las mismas opiniones sobre el sistema político de Cuba, el embargo norteamericano, u otros temas vinculados a la relación Cuba-Estados Unidos. En cambio, todos sí coincidimos en que el terrorismo debe ser denunciado, más allá de las ideologías que lo motivan.
Documentos en orden citados:
* Exclusion of Proceeding for Orlando Bosch Avila. U.S. Department of Justice. Office of the Associate Attorney General Joe D. Whitley, 1989. FILE: A28 851 622. A11 861 810.
* Appendix to Hearings Before the Select Committee on Assassinations of the U.S. House of Representatives, Ninety-fifth Congress. Second Session, Volume X: Anti-Castro activities and organizations. March 1979: (89-93)
* Intelligence Information Cable. FBI. October 14th, 1976. National Security Archives. Cuba Project.
Photographs and videos of the event.
CIA and FBI Declassified Documents on Cuba: National Security Archive. Cuba Project