Raúl
San Miguel
Foto:
Jorge Luis Sánchez Rivera
A Zenia Marabal (actriz cubana)
“Tuve
amigos, entre rostros conocidos,
que alentaron
mi alegría en lontananza
y
enemigos escondidos en las ranflas
que
hundieron, en mi pecho, sus palabras musitarías”
(Fragmentos
de vida, RSM)
En Cuba
una frase que forma parte del choteo nacional se atribuye a cierto cartel que
pusieron en un lugar de Pinar del Río, para anunciar que la Orquesta Sinfónica
Nacional estaría en determinado teatro; pero el cartel, lleno de entusiasmo,
rezaba: “…a cantar y a bailar con la Sinfónica Nacional”. Esta frase se resumió
en un compendió de anécdotas inventadas o no que incluían el olvido de una
máquina herramienta para elaborar morteros de concreto (concretera, le llamamos
los cubanos) olvidada dentro de un cine recién terminado de construir y después no podían sacar por las puertas. Fábula o
no, desde el acervo popular se las tomaron con los pinareños y surgieron
muchísimas referencias hacia los nacidos en este territorio que –desde mi punto
de vista personal- es realmente hospitalario, de personas increíblemente
sencillas, modestas, humanas e inteligentes hasta para soportar los chistes que
les atribuyen sus coterráneos de otras provincias del país.
Pues
sucedió en La Habana, en el centro histórico de la ciudad, en la Plaza del Convento de San Francisco de Asís, frente a la mirada
de personas de todas las latitudes, cuando la soprano Bárbara Llanes, cubana de piel
caucásica y rasgos europeos interpretó una criollísima y mestiza Cecilia Valdés que podía dejar
pálida, por la belleza del registro de su voz, al personaje de la Loma del Ángel que inmortalizó Cirilo Villaverde en
la novela de igual nombre. Pero sobre todo porque estaba acompañada de la
Orquesta Sinfónica Nacional, dirigida por el Maestro Enrique Pérez Mesa, y en
el Coro Ópera Nacional de Cuba, a cargo de Denise Falcón.
Como
estaba previsto subieron a la escena, en la Plaza del Convento de San Francisco
de Asís, justo donde está la estatua al Caballero de Paris, los integrantes de
la Orquesta Aragón y se armó la gozadera, como decimos los cubanos dentro y
fuera de la Isla, sin excluir a los aplatanados como llamamos a los nacidos en
otros países que se compartan y hablan como si fueran del cualquier barrio habanero.
![]() |
Soprano Bárbara Llanes |
La
soprano Bárbara Llanes, hizo honor a su nombre y cantó y bailó con la Orquesta
Aragón, haciendo que el público rompiera todo el protocolo de la ocasión, en el popular espacio donde
se realizaba la velada (me hizo evocar la Canción del Bongó de nuestro Nicolás Guillén): Concierto por mi Habana, en saludo al aniversario 56
del triunfo de la Revolución y en saludo al nuevo 57 año de luchas que nos
espera y, donde el propio Historiador de la Ciudad, el Doctor Eusebio Leal
Spengler, marcó el ritmo de la clave cubana con sus pies, mientras el
estribillo de El bodeguero y otros
temas de la Orquesta Aragón, se repartían de boca en boca entre los presentes,
hasta el punto de que varios personas, incluso niñas, no pudieron sostenerse en
sus butacas y se fueron a bailar y a gozar con la Sinfónica Nacional.
De modo
que nada puede dejar de ser en un país donde la utopía no es un concepto de
referencia filosófica porque es la cotidianidad la que nos da fuerzas para reírnos
hasta de nuestros problemas domésticos –nada comparados con la cruda realidad
de otros países, incluidos del llamado primer mundo- como el anuncio de las
ferias agropecuarias que, supuestamente, llevarían a la mesa productos
alimenticios cuyos precios pueden estar tan distantes del bolsillo como una
galaxia en el otro extremo del universo. Sin embargo, allí estaban las tarimas,
las colas, la gente hablando y desbarrando, pero riendo, entonces ¿Cómo puede
ser imposible bailar y gozar con la Sinfónica Nacional?
Nota:
Con este breve artículo les deseo a los cibernautas de este blog, lo mejor para
el año 2015 y me dejo como tarea algunas cuestiones como: ¿Cuáles son los límites de La Habana? (referido a las diferencias,
establecidas por decisores políticos en cuanto a la presencia de periodistas de
órganos provinciales y nacionales en determinadas coberturas de prensa. Acoto y
adelanto que deberían resolverse de una forma salomónica: crear los estudios de
Técnico Medio en Periodismo, para quienes laboran en el sistema de la prensa
provincial y local y de Periodismo, nivel superior o universitario, para
quienes tendrán el privilegio de trabajar en órganos de prensa nacionales. De esta
forma no habría muchos problemas a la hora de acreditar),Tribulaciones, contrastes y diferencias divergentes entre los decisores
y las instituciones del conocimiento (Supongo que se entiende), y otros
temas que espero –si la salud personal, que es lo más importante- me acompaña,
prometo escribir y compartir en nuestro blog.
En lo
personal ha sido para mí un año difícil, de aprendizaje continuado, de entender
a los demás y respetar el derecho a continuar sus vidas y evitar cualquier
interferencia que pudiera hacer infeliz a otros. El regreso de los Cinco Héroes antiterroristas cubanos, que permanecieron presos en cárceles de Estados Unidos, después del amañado proceso judicial condicionado por la presión del lobby anticubano y contrarrevolucionario de Miami (Congresistas Lincoln Díaz-Balart e Ileana Ross Lethinen) y el reto de restablecer relaciones con el gobierno de Estados Unidos, a partir de las decisiones de un Congreso donde persisten fuertes presiones para mantener el bloqueo genocida contra mi país.
Recuerdo, mientras escribo esta larga nota, recuerdo aquel artículo que escribí: Regalo de hojalata y proscribí de mi blog, por cuestiones personales, no definitivas, aprendo cada día la lección de vivir.
Recuerdo, mientras escribo esta larga nota, recuerdo aquel artículo que escribí: Regalo de hojalata y proscribí de mi blog, por cuestiones personales, no definitivas, aprendo cada día la lección de vivir.
Como algo esperado, en la próxima Feria Internacional del Libro de la Habana, saldrá un
título de la Editorial Letras Cubanas que recoge dos de mis relatos escritos en
favor de las mujeres. Esto me recuerda un espacio que intenté mantener en este
blog: Cartas a una mujer. Bueno…, demasiado larga la nota. Si quedó algo por decir, me alegro, señal de que estoy vivo.
A mis
amigos y amigas ¿Qué les deseo para el nuevo 2015…? Sería improvisado decir nada, tampoco oportuno enumerar cosas (siempre lo mejor). Creo
que lo más importante es que aprendamos a respetar, de una vez y por siempre, a
las personas que nos rodean y, sobre todo, no creer que siempre tenemos la
razón y somos portadores de la verdad, en ninguna de las variantes que podamos
atribuir como reales y mucho menos definirnos epicentros del universo social. Además, ¿Quién soy para dar consejos, ni aseveraciones?
He pensado, que lo más importante siempre está por venir, hasta el momento en
que no descansemos en paz, porque (supongo) nadie está dispuesto a renunciar a
sus sueños, aunque suponga bailar, sin música y a la luz de la Luna.
Como regalo les comparto, entre ola y ola, olor de salitre y melaza, desde la tierra cubana, esta Canción del Bongó, del Poeta Nacional Nicolás Guillén.
Gracias a todos los que contribuimos a que otro mundo mejor puede ser posible.
Como regalo les comparto, entre ola y ola, olor de salitre y melaza, desde la tierra cubana, esta Canción del Bongó, del Poeta Nacional Nicolás Guillén.
*La frase que tomo por título reza así: “A bailar y a
gozar con la sinfónica nacional”
Gracias a todos los que contribuimos a que otro mundo mejor puede ser posible.
La
canción del bongó
Aquí
el que más fino sea,
responde, si llamo yo.
Unos dicen: ahora mismo,
otros dicen: Allá voy.
responde, si llamo yo.
Unos dicen: ahora mismo,
otros dicen: Allá voy.
Pero
mi repique bronco,
pero mi profunda voz,
convoca al negro y al blanco,
que bailan el mismo son;
pero mi profunda voz,
convoca al negro y al blanco,
que bailan el mismo son;
cueripardos
y almiprietos
más de sangre que de sol,
pues quien por fuera no es noche,
por dentro ya oscureció.
más de sangre que de sol,
pues quien por fuera no es noche,
por dentro ya oscureció.
Aquí
el que más fino sea,
responde, si llamo yo.
En esta tierra, mulata
de africano y español
responde, si llamo yo.
En esta tierra, mulata
de africano y español
(Santa
Bárbara de un lado,
del otro lado, Changó),
siempre falta algún abuelo,
cuando no sobra algún Don
del otro lado, Changó),
siempre falta algún abuelo,
cuando no sobra algún Don
y
hay títulos de Castilla
con parientes en Bondó:
vale más callarse, amigos,
y no menear la cuestión;
con parientes en Bondó:
vale más callarse, amigos,
y no menear la cuestión;
porque
venimos de lejos,
y andamos de dos en dos.
Aquí el que más fino sea,
responde si llamo yo.
y andamos de dos en dos.
Aquí el que más fino sea,
responde si llamo yo.
Habrá
quien llegue a insultarme,
pero no de corazón;
habrá quien me escupa en público,
cuando a solas me besó...
pero no de corazón;
habrá quien me escupa en público,
cuando a solas me besó...
A
ése, le digo: Compadre,
ya me pedirás perdón,
ya comerás de mi ajiaco,
ya me darás la razón;
ya me pedirás perdón,
ya comerás de mi ajiaco,
ya me darás la razón;
ya
me golpearás el cuero,
ya bailarás a mi voz,
ya pasearemos del brazo,
ya estarás donde yo estoy.
ya bailarás a mi voz,
ya pasearemos del brazo,
ya estarás donde yo estoy.
Ya
vendrás de abajo arriba,
¡que aquí el más alto soy yo!
Nicolás Guillén
¡que aquí el más alto soy yo!
Nicolás Guillén